Si bien es cierto que el aprendizaje viene dado gracias a diferentes elementos inmersos en él, el docente juega un papel primordial e importante, es imperioso establecer no sólo el conocimiento o esa inteligencia analítica, más bien debemos manejar la inteligencia creativa para poder generar una inteligencia práctica, no es aplicar técnicas, estrategias para enseñar o guiar, tener un recetario.
Muchos docentes se preguntan por qué los alumnos no quieren escribir, por qué en la cultura venezolana hay mas arraigo a la oralidad, por qué es tan difícil escribir. La respuesta es obvia, no hay la oportunidad de revisión, no han dado la facilidad para reescribir, sólo escribimos para obtener una nota, es decir, se escribe con una intención y la intención que nos han enseñado es para obtener una calificación y no para revisar.
La escritura es un proceso complejo, una actividad reguladora por parte del escritor, donde se observan las restricciones de contenido y de género, por lo tanto el producto escrito es el resultado del trabajo mental sobre estos componentes. De esta misma manera y como procesos que no son desligados, la lectura juega un papel importante, tal como lo establece William Hall (1989) “el lector apto actúa deliberadamente y supervisa su propia comprensión….Y refina progresivamente la interpretación de un texto” ¿Cual será el papel del docente para guiar el proceso de transgresión y de transformación del trabajo mental mediante la escritura? De acuerdo a la experiencia y a la aplicabilidad del proceso enseñanza aprendizaje, se debe propiciar la construcción de la representación, de acuerdo, a lo asignado y la intención del género, localizando el tópico para así a través del resumen, ubicación de ideas principales, subrayado, citas textuales, comentarios, gramática entre otros se genere un texto (estructura del texto, superestructura textual, estructura semántica, estructura formal).
Entonces esa coherencia y el conocimiento implícito del mundo (tópico, género, cultura, conocimientos previos) formará un enunciados y este actuará como disparador del siguiente. Es así como el docente será generador de experiencias, contenidos, materiales escritos. Y poder llegar al modelo, enunciado por Bereiter y Scardamalia, iniciar a los alumnos al proceso de solución de contenido y espacio retórico, estableciendo relaciones entre el contenido conceptual, los pensamientos, sentimientos, motivos y comportamiento humano (reacción del lector) logrando el proceso de producir un texto, no sólo una interacción sino el resultado de un trabajo constante y controlado.En conclusión, el maestro debe iniciar estrategias que generen ideas y formas, para así lograr un trabajo mental y compartido (intencional, consciente y controlado), creando 3 condiciones, ser claro en el objetivo, plano y la consideración de la audiencia. El docente evaluara el proceso y la producción a través del esquema, dos o tres borradores y por ultimo la producción escrita (informe, ensayo, cuento…entre otros) y el alumno realizará a una negociación de tareas articulando la planificación, textualización y por ultimo la revisión de cada una de sus producciones. La tarea es Acompañar al escritor, quien deberá estar conciente de la intención que tienen sus palabras, a quién va dirigido, para qué sirve dicho escrito, darse el permiso de revisar, repetir y ejercitar, establecer minutas, esclarecer sus dudas y preguntas a medida que escribe, buscar relaciones conceptuales y referencias teóricas, antagonismos, relaciones, convalidaciones, en fin, estar abierto al conocimiento, y que este conocimiento esté de su lado y emprenda la construcción de imágenes y representaciones en el lector, logrando una interacción y un apego a sus ideas.
MSC. MARÍA ZURITA
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor no olvides colocar tu nombre o email para hacer mas dinámica la participación . . .
Maria Zurita